Caminante, no hay camino, se hace camino al andar…

Este verano, te proponemos realizar el Camino de Santiago con tus hijos; una aventura con la que podrás pasar más tiempo con ellos mientras disfrutas de paisajes y momentos inolvidables. En este artículo descubrirás todo lo que hay que tener en cuenta para realizar el Camino con los más pequeños:

 

 

En el año 830, un ermitaño llamado Pelayo vio unas luces que provenían de un bosque cercano. Al ver que este fenómeno se repetía cada noche, decidió avisar a Teodomiro (obispo de Iria Flavia). Juntos acudieron a ese lugar, donde descubrieron los sarcófagos del aposto Santiago el Mayor y sus discípulo, Anastasio y Teodoro. 

 

Asombrados por haber descubierto los restos del apóstol Santiago avisaron al rey Alfonso II el Casto, que no dudó en ir cuanto antes con toda su corte desde Oviedo hasta Santiago. Y así fue como este rey se convirtió en el primer peregrino. 

 

Una vez allí, Alfonso II levantó una capilla junto al mausoleo que había encontrado Teodomiro. Con el paso del tiempo, fue sufriendo diversas reconstrucciones y ampliaciones hasta que, en el año 1705, se construyó la actual catedral románica que hoy podemos ver en la Plaza del Obradoiro en Santiago de Compostela. 

 

 

1. Hay diez rutas diferentes (desde el Norte, por el mar, desde Portugal, la vía de la Plata…), pero el Francés (desde Roncesvalles) es el más transitado. Este último es el más aconsejable para ir con niños, ya que otros caminos tienen los albergues más distanciados y no permiten hacer etapas cortas. El Camino Francés entra en España por dos sitios: Roncesvalles (Navarra) y Somport (Huesca), ambas ramas se unen en Puente La Reina (Navarra) y siguen por Estella, Logroño, Santo Domingo de la Calzada, Burgos, Frómista, Carrión de los Condes, Sahagún, León, Astorga y Ponferrada, entrando en Galicia por O Cebreiro.

 

 

2. Si no estás muy acostumbrado a andar o es la primera vez que lo haces, se recomienda realizar a pie solo los últimos 100 kilómetros del Camino Francés, ya que es la distancia mínima exigida para recibir la Compostela (credencial del peregrino). Cada etapa oscilará entre los 15 y 20 kilómetros.

 

3. Para lograr la Compostela, hay que sellarla en los distintos puntos del recorrido y, ya en Santiago, recoger el certificado que os acredita como peregrinos compostelanos. No es imprescindible para andar, aunque sí para pernoctar en los albergues. Ten en cuenta que si los niños son pequeños o no duermen bien, es mejor alojarse en hostales o casas rurales. 

 

4. Emprender el camino junto con otras familias puede ser una buena opción, ya que los niños estarán más entretenidos y podréis contar con un coche de apoyo donde cargar las mochilas o adelantar algunos kilómetros a los que se cansen. No obstante, existen empresas que ofrecen estos servicios siempre que lo necesites. 

 

5. Los días previos es recomendable realizar paseos cada vez más largos, con la mochila cargada y el calzado que vayan a utilizar durante el viaje. 

 

6. Los primeros días del Camino es mejor hacer etapas cortas. Además, conviene parar cada hora para descansar y tomar alimentos que proporcionen energía (zumos, batidos, barritas de cereales, dulces, fruta fresca, frutos secos…).

 

7. Si realizas el Camino en los meses de verano, camina solo por la mañana. Levántate temprano para evitar las horas de calor y deja las tardes libres para descansar. Traza un plan donde los días de caminar se alternen con visitas a parques naturales, actividades de aventuras y talleres infantiles.

 

 

 

La primera parada será en Pamplona. Recorriendo el Paseo de Ronda os transportaréis hasta el medievo, mientras que en los Jardines de la Taconera os convertiréis en auténticos granjeros viendo ciervos, patos, conejos… No dejéis de visitar el Desierto de las Bárdenas Relaes y el Parque Senda Viva antes de continuar vuestro camino hacia Estella y Puente La Reina.  

 

 

 

Durante el paso por Logroño, se recomienda visitar la Casa de las Ciencias; la Bodega Vivanco (donde los pequeños disfrutarán de catas de mostos y talleres de elaboración de gominolas con uvas); el Parque de Aventura Sierra de Cameros y el Oja Park de Santo Domingo de la Calzada. 

 

 

 

En la capital burgalesa, podréis repasar todo lo aprendido sobre el gótico visitando iglesias, colegiatas y, por supuesto, la Catedral. Algo muy atractivo para los niños será visitar el Museo de los Dinosaurios de Salas de los Infantes.

 

 

 

Llegados a Palencia es el momento de jugar a encontrar las diferencias. A través de almenas, muros de piedra y ventanas pequeñas, descubrirán el arte Románico y aprenderán a distinguirlo del Gótico. 

 

 

 

Por todos es conocida la pugna que León mantiene con Burgos por ser la mejor Catedral del gótico. En época medieval, Astorga y León eran las campeonas de su región. Ponferrada, en cambio, presumía orgullosa de su Castillo Templario.

Pero como no todo van a ser piedras y lecciones de arquitectura, os recomendamos visitar las Médulas, una antigua mina de oro en tiempos de los romanos. 

 

 

 

A partir de Sarriá caminaréis entre castaños, robles, pinos, puentes de piedra sobre riachuelos… Es desde esta etapa donde comienzan a contar los 100 últimos kilómetros hasta Santiago. 

 

 

 

¿Sabíais que entre los antiguos peregrinos el primero que atisbaba el templo era nombrado rey del grupo? Cuando lleguéis a Monte del Gozo vosotros también podréis competir para ser el primero en ver la catedral compostelana. 

 

Si llegáis antes de las 12:00 a.m, podréis disfrutar de la misa del peregrino. Una vez terminada, ya solo os queda acudir a la Oficina del Peregrino donde os estamparán el sello final y recibiréis la Compostela.

 

Si te decides a hacer este fantástico plan, no dudes en compartir una foto en tus redes sociales mencionándonos ¡Buen Camino!